Feliz día, papá

Hoy es el día del padre y me gustaría mucho hacerles desde aquí un pequeño homenaje.

Sé que este puede ser un tema delicado para todas aquellas familias que estén en procesos de separación, en conflictos internos y familiares, etc. Por ello os pido que o bien leáis vosotros el post antes de que lo hagan vuestros hijos o que directamente no le leáis si pensáis que este tema os puede hacer daño, porque para nada esa es la intención, pero soy consciente de que este tema puede despertar y generar sentimientos dolorosos y emociones confrontadas (rabia, frustración, tristeza, melancolía, nostalgia…).

Hasta hace poco para mí también era un tema muy doloroso pues estaba en pleno proceso de duelo (quizás aún sigo estándolo), pero ahora trato de enfocar en él emociones positivas como la del orgullo por el maravilloso padre que tuve; de satisfacción porque le disfruté todo lo que pude; de admiración y sobre todo, gratitud porque a pesar de que no tengo el privilegio de poder seguir gozando de su presencia (al menos física, quién sabe si la habrá espiritual) tengo tanto que agradecerle…pues soy lo que soy en buena parte gracias a él. 

Al margen de la relación que podamos tener con nuestros padres, no podemos ni debemos de olvidar que gracias a ellos, y a nuestras mamás, estamos hoy aquí, y aunque sólo sea por eso debemos de estarles agradecidos pues nos dieron el mejor regalo que se puede dar…la VIDA.

Por eso hoy, desde el blog queremos felicitaros a todos los papis. Sabemos que no es una tarea fácil pero no hay trabajo más bonito en este mundo que ver crecer y querer a nuestros hijos. Os animo a que paséis tiempo con ellos y que les transmitáis el mejor ejemplo posible pues ellos serán mañana el fiel reflejo de vosotros, por eso haced que ellos, vuestros hijos, sean vuestro mejor proyecto.

Yo, con vuestro permiso, también quiero aprovechar para felicitar al mío. A él le encantaba la profesión que había elegido y estoy segura que le gustaría muchísimo todo este proyecto de emociones que estamos trabajando en el cole, porque él también era muy emotivo y sensible. Allá donde quiera que estés, sé que sigues conmigo, y por favor, nunca dejes de estarlo. Sabes que te quiero y que te querré hasta el fin de mis días. ¡Feliz día!