domingo, 21 de junio de 2015

Nuestro cofre del tesoro, nuestro cofre de los recuerdos

El curso va llegando a su fin y con él nuestras misiones.
Este miércoles los niños llevaron a cabo la última misión de este curso, y fue muy emotiva para todos.
Cuando fui a visitarles les pedí que cerraran los ojos y que se relajaran. Esto lo hicieron de maravilla, se notaba que ya lo habíamos trabajado anteriormente. Cuando estuvieron relajados les pedí que intentaran recordar cuál había sido el momento más especial que habían vivido este curso en el cole. Tenían que recrearlo en su cabeza con el mayor lujo de detalles que pudieran, lo que estuvieran haciendo en ese momento, con quién, cómo se sintieron, etc. e intentar revivir aquellas emociones positivas que sintieron. Una vez que ya lo habían visualizado en su mente, les pedí que lo escribieran en un papel. Los más peques de infantil lo dibujaron. Como esta era una misión tan especial no quería que la hicieran deprisa, todo lo contrario, quería que se recrearan en esos recuerdos pues ha sido un curso tan intenso que tienen muchos momentos bonitos para elegir, y eso no les resultaba fácil. Por ese motivo les dejé realizando la actividad y les dije que a lo largo de la semana pasaría por sus clases con nuestro "cofre de los recuerdos" para recoger ese recuerdo, ese tesoro suyo.
Y así lo hice, a lo largo de la semana he vuelto a sus clases con nuestro "cofre de los recuerdos" y cada niño ha ido metiendo en él su recuerdo no sin antes compartirlo en voz alta aquel que lo ha deseado. Ha sido un momento muy emotivo en el que hemos echado la vista atrás y hemos recordado juntos muchos momentos felices que hemos vivido a lo largo de este curso. Momentos que no queremos olvidar porque para nosotros esas vivencias, esos sentimientos... son un tesoro.
Ahora guardaremos con mucho cariño ese cofre y los niños ya están deseando poder llenar otro, porque lo mejor siempre está por llegar.

Y colorín colorado, las misiones de este año se han terminado. Espero que las hayáis disfrutado tanto como vuestros hijos y como mis compis y yo. Esta ha sido experiencia maravillosa para todos nosotros y ojalá que éste sólo sea el comienzo de una larga aventura... emocional.

Pero aunque nuestras misiones hayan terminado, nuestro latido emocional continuará latiendo y activo en verano, así que el que desee latir... aquí estaré. ¡¡Hay tanto que sentir!!
























































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